La esperanza de volver a ver con vida a Damaris Abril “C.” terminó en tragedia.
La joven de 22 años, reportada como desaparecida desde el 27 de febrero, fue identificada por su madre en las instalaciones del Servicio Médico Forense (SEMEFO), tras el hallazgo de su cuerpo en una fosa clandestina.
El descubrimiento fue realizado por integrantes de un colectivo de búsqueda de personas desaparecidas, quienes localizaron restos humanos en un predio baldío ubicado al oriente de la ciudad, cerca del Aeropuerto Internacional de Reynosa.
El cuerpo presentaba evidentes signos de violencia, lo que encendió nuevamente las alarmas sobre la crisis de inseguridad que enfrenta la región.
Autoridades ministeriales realizaron los estudios forenses correspondientes, confirmando posteriormente que los restos pertenecían a la joven desaparecida. La madre de Damaris Abril, quien se había unido activamente a la búsqueda desde el inicio de la desaparición de su hija, compartió entre lágrimas un mensaje en redes sociales:
“Mi niña ya descansa en paz, con todo el dolor de mi corazón. Le doy las gracias a Dios por regresármela, no como yo hubiera querido. Les deseo de todo corazón que quienes estén pasando por lo mismo no pierdan la fe.”
Familiares, amigos y colectivos de búsqueda despidieron a Damaris Abril en un emotivo funeral, marcado por el dolor y la indignación.
Para los colectivos, este caso refleja la urgencia de que las autoridades fortalezcan las acciones de búsqueda y justicia frente a la creciente ola de desapariciones en Tamaulipas.