Cansados de promesas incumplidas y soluciones temporales, habitantes de Villa Cuauhtémoc y otras comunidades rurales de Altamira bloquearon este miércoles la carretera federal Tampico–Mante durante más de dos horas, exigiendo el restablecimiento inmediato del servicio de agua potable.
El cierre, que inició a las 10:00 de la mañana y terminó poco después del mediodía, paralizó el tránsito en ambos sentidos y provocó kilométricas filas de vehículos, afectando a transportistas y automovilistas.
Los manifestantes señalaron que el problema, lejos de ser nuevo, se arrastra desde hace años y que la autoridad municipal y la Comapa han sido incapaces de ofrecer una solución definitiva.

En los últimos tres días, el corte total del servicio los dejó sin posibilidad de realizar sus actividades básicas, en medio de temperaturas extremas. “Ya son semanas sin agua, y siempre es lo mismo: que si se reventó una tubería, que si no hay presión, que si se fue la luz. La gente aquí vive al día, y sin agua no se puede trabajar ni vivir con dignidad”, denunció Sergio Vargas González, vecino de la comunidad.
Además de la falta de suministro, acusan cobros excesivos, reparaciones incompletas que dejan las calles intransitables y una total indiferencia de la autoridad ante las quejas ciudadanas.
“Aquí tenemos que decidir entre pagar el recibo o comprar agua embotellada para sobrevivir. Y mientras tanto, nos siguen cobrando como si el servicio fuera de lujo”, reclamó otra pobladora.
Entre las comunidades afectadas se encuentran también el ejido Benito Juárez, Esteros, Kilómetro 40, Río Tamiahua, Miradores de la presa, entre otros, cuyos pobladores se sumaron al reclamo.

Solo después del bloqueo, y bajo presión, el alcalde Armando Martínez Manríquez y el gerente de la Comapa, acudieron a la zona para comprometerse a enviar pipas y reparar una falla en un ducto que extrae agua del río Tamesí. Sin embargo, los propios funcionarios reconocieron que la tubería de casi 13 kilómetros está obsoleta, lo que ha provocado rupturas constantes.
Pese a ello, la sustitución de la infraestructura sigue sin fecha concreta, dependiendo de gestiones estatales y federales que podrían prolongarse indefinidamente.
Los vecinos advirtieron que, si la autoridad no actúa de inmediato y de forma definitiva, retomarán el bloqueo este jueves. “Si no nos escuchan por las buenas, nos escucharán cerrando la carretera las veces que sea necesario”, afirmaron.