Ya estamos en plenas campañas electorales al menos en las federales, y ya vienen las locales en algunos días.
Y ya estamos viendo como se comete un delito flagrante, consignado en la ley electoral, que es entregar dádivas a cambio de buscar ganar votos.
Ha visto usted que ya muchos candidatos están ofreciendo becas, tarjetas de despensa o reparten playeras y hasta peluches.
Según una nota periodística, Hipólito Deschamps, candidato de MC a la gubernatura de Veracruz, se fue a un mercado a repartir billetes de 500 pesos, según andaba comprando artículos, pero no importaba cuanto costara les pagaba con billetes de 500 y les decía que se quedaran con el cambio.
En Culiacán, Sinaloa, el candidato al Senado del PT, Jesús Estrada, fue a un mercadito a regalar peluches con su imagen.
En elecciones pasadas también vimos a candidatas y candidatos que regalaban tarjetas con apoyos económicos que se activarían si ellos resultaban electos.
Esos regalos no están pagados con dinero del bolsillo del candidato sino con los impuestos ciudadanos.
Deberíamos de pensar que candidato que regala algo es porque no trae propuestas y mejor te quiere comprar o sencillamente porque es corrupto ya desde ahora, ya se están gastando tu dinero.