Nos enteramos que la automotriz japonesa Mazda pidió a sus agencias en Monterrey suspender de manera indefinida la recepción de autos chocados, argumentando que existe un déficit y no cuenta con la capacidad para atenderlos.
De acuerdo con una carta firmada por Ian Colyer, gerente del Collision Center de la compañía automotriz en Monterrey, están enfrentando un “incremento en la siniestralidad” de vehículos.
Lo que ocurre con Mazda se suma a la crisis que viven las agencias de autos en la entidad, que incluso no cuentan con la capacidad para brindar un servicio de calidad y primera a sus clientes.
Uno de ellos es el caso de Mercedes Benz, que está tardando más de un mes para realizar la entrega de refacciones, que incluso ya se encuentran en su sede o almacenes localizados en la Ciudad de México.
Este miércoles también informó que la alta demanda y recuperación de la industria automotriz, ha provocado que las agencias están batallando para tener suficiente inventario de refacciones, lo que hace que los procesos de atención con sus clientes se vean rezagados.
Monterrey es una ciudad en la que andar sin carro es hoy un viacrucis, por un transporte público abandonado por décadas y ahora que lo están levantando pues va a tardar. Así que por lo pronto la gente va a andar en carro y ahora resulta que si quieres un carro nuevo o seminuevo y se descompone ahora lo tienes que dejar meses en la agencia.