Elementos de Protección Civil estatal, en coordinación con Protección Civil de Guadalupe, partieron nuevamente hacia Texas para sumarse a la segunda fase de búsqueda y rescate de personas desaparecidas, tras las severas inundaciones ocurridas el pasado 4 de julio en esa región.
En total, 26 elementos especializados, 22 pertenecientes a la corporación estatal y 4 más del municipio de Guadalupe, se desplazaron con un convoy equipado para atender emergencias en zonas de difícil acceso.
El grupo cuenta con más de cuatro camionetas, dos jetski, una lancha de rescate, cuatrimotos y un equipo canino entrenado en localización de personas.
El despliegue responde a una solicitud de colaboración por parte de las autoridades texanas.
En esta ocasión, los cuerpos de emergencia neoloneses, se estarán desplegando en el condado de Comal, donde desemboca el río Guadalupe, uno de los principales cuerpos de agua afectados por la crecida que provocaron las lluvias torrenciales.
Como se sabe, elementos estatales junto con rescatistas de diversas corporaciones municipales y Bomberos Nuevo León estuvieron ocho días prestando ayuda en los condados de Kerrville, Hunt, Camp Mystic, Mountain, Confort e Ingram.
Este lunes, en la conferencia Nuevo León Informa, el director de la corporación estatal, Érik Cavazos, destacó que el estado siempre es solidario y presta ayuda incondicional, sin importar distancias o recursos.
El apoyo de Nuevo León fue solicitado por las propias autoridades estadounidenses, conociendo la capacidad de quienes integran la corporación estatal.
Esta vez, además de los rescatistas y el grupo canino de Manada K9, la fuerza desplegada consiste en:
—Unidades ligeras 4x4.
—Lanchas para búsqueda fluvial.
—2 Jetskys.
—Binomios caninos para localización de personas.
—5 camionetas Pick Up
—1 Van
—2 cuatrimotos.
—1 "mula"
Las acciones se coordinan en conjunto con autoridades de Texas, en seguimiento al compromiso humanitario del gobierno de Nuevo León.
La zona en la que ahora prestarán ayuda es donde se espera que haya restos de cuerpos.
Se espera que el equipo permanezca en la zona afectada durante una semana para apoyar en las labores de rastreo, recuperación y evaluación de riesgos.
Con información de Olivia Martínez