Seis nuevos parabuses instalados por el Gobierno de Nuevo León en puntos estratégicos de la zona sur de Monterrey para dar servicio al Transmetro y ofrecer resguardo seguro a miles de usuarios, fueron retirados abruptamente por el municipio de Monterrey.
El municipio, que realizó el retiro de la noche a la mañana, alegó que los parabuses estatales carecían de permiso.
Esta acción dejó a miles de ciudadanos sin un espacio adecuado para resguardarse de las inclemencias meteorológicas en una de las avenidas más transitadas de la ciudad, como lo es Avenida Garza Sada.
Los módulos retirados se encontraban ubicados en puntos de alta afluencia como entre Fernando García Roel y Luis Elizondo; frente al campus Mederos de la UANL; en el cruce con Arroyo Seco; en la Colonia Sierra Ventana; a la altura de Más Palomas y en el cruce con Luis Elizondo.
Los parabuses forman parte de un proyecto de la Secretaría de Movilidad estatal, anunciado el pasado 19 de septiembre para instalar 500 módulos de espera y mobiliario urbano moderno en toda la urbe regia.
Los tres prototipos de parabuses cuentan con características innovadoras pensadas para el bienestar ciudadano: iluminación solar para garantizar seguridad nocturna, accesibilidad universal con rampas y espacios adecuados para personas con discapacidad, adultos mayores y madres con carriolas y puntos de recarga USB para dispositivos móviles.
En otros municipios del área metropolitana como Escobedo, San Pedro y Guadalupe, los parabuses con estas características modernas continúan operando sin contratiempos, ofreciendo un servicio mejorado a los usuarios del transporte público.