Una unidad de Bomberos que mide de ancho 2 metros con 55 centímetros y de fondo 10 metros con 42 centímetros, no alcanzaría a dar la vuelta ni a ingresar en una de las reducidas calles de Monterrey para apagar un incendio.
La calle Modesto Arreola, en el centro de Monterrey, no es amigable con los Bomberos.
Quedó muy reducida de ancho, como parte del programa que el Municipio de Monterrey implementa para hacer más grandes las banquetas, quitándole espacio a las calles.
Con cinta métrica, medimos la dimensión del camión de los Bomberos.
El largo de la unidad mide 10 metros con 42 centímetros.
Y de ancho, mide 2 metros con 55 centímetros.
También, con cinta en mano, medimos el ancho que le dejaron a esa vialidad, a la altura de la calle Escobedo: las banquetas de Modesto Arreola están súper grandes, miden desde 2 metros con 36 centímetros, hasta 3 metros con 20 centímetros.
Pero si le quitamos el espacio reservado del lado izquierdo para el estacionamiento de los autos, que sí está permitido, la calle se reduce aun más.
Y la unidad de Bomberos, que mide de ancho 2 metros con 55 centímetros de ancho, de plano no puede pasar.
El exdirector de Tránsito, Ervey Cuéllar, dijo que lo ideal es que las calles aumenten su ancho, para resolver los problemas de movilidad, y no que se reduzcan.
"Estamos viviendo una epoca de calles encogidas, y tal vez estos sea una ocurrencia”, sostuvo.
Las consecuencias de que una unidad de emergencias no ingrese a la calle podrían ser fatales.