Luego de que el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Medio Ambiente, ordenó que las pedreras suspendieran actividad ante el pronóstico de fuerte viento, dichas empresas no acataron la instrucción en su totalidad, pues aunque algunas empresas detuvieron trabajos de extracción, sí seguían moviendo material en camiones sin las medidas de mitigación adecuada, lo que siguió generando partículas de polvo hacia el ambiente.
En un recorrido de INFO7 se constató que, aunque dos pedreras colocaron el sello de que suspendían actividades, al interior continuaban operando con el traslado del material extraído.
En entrevista para este medio, Alfonso Martínez Muñoz, titular de la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León, subrayó que la instrucción de suspensión de actividades no solo correspondía a la detonación y extracción, sino también a toda aquella actividad que implicara la emisión de particulado, tal como el rodamiento de los transportes que trasladan el material extraído de las pedreras, cementeras, caleras, concreteras y toda actividad de construcción.
“Nosotros le dijimos que pararan operaciones, todo tipo de operación, eso es lo que dice la alerta, si producen los camiones emisiones puede haber una sanción. Era parar totalmente”, dijo el funcionario.
A su vez, durante el recorrido tampoco se percibió que las empresas humectaran el suelo para evitar tolvaneras, una de las principales recomendaciones que realiza la autoridad ante este tipo de contingencias.
Incumplen suspensión
Triturados San Jerónimo, en el municipio de Santa Catarina, tenía la manta de suspensión emitida por el gobierno estatal; sin embargo, se apreció la entrada y salida de camiones con material cubierto con lonas.
Y aunque no tenía colocada la manta de suspensión, lo mismo ocurría en REBASA, no había detonaciones y tampoco se percibía el sonido de triturado, solo la entrada y salida de camiones.
Horas antes se emitió un comunicado en el que se señaló que la determinación se tomó debido al pronóstico de vientos con dirección del noroeste cuya velocidad promedio se estima en 25 kilómetros por hora, no descartando la presencia de ráfagas de hasta 40 km/h, las cuales elevarían la concentración del contaminante criterio PM10.
En la misiva se instruyó a la población abstenerse de encender fogatas y no realizar actividades que propicien incendios.
Con información de elhorizonte.mx