El gusto de poder deleitar el paladar y conmemorar el 2 de noviembre con el tradicional pan de muerto, ahora le saldrá hasta un 25% más caro a los mexicanos.
Y es que a nivel nacional, la pieza de este producto pasó de venderse de $12 a $15 pesos, es decir, un alza de un 25%, según datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
En Nuevo León el incremento en su precio de un año a otro es de un 9%, al pasar de venderse de $12.80 pesos a $14.00 pesos la pieza, reveló en un reporte el Centro de Investigaciones Económicas(CIE) de la Facultad de Economía de la UANL.
La ANPEC señaló que parte de este incremento en el precio se ve influenciado por el aumento de poco más de un 30% que registran los principales insumos que se utilizan para su elaboración, entre ellos, el azúcar.
“Entre 2022 y 2023 el precio unitario del pan de muerto pasó de $12 a $15 pesos y en las panaderías locales el costo del pan se encuentra en $10 pesos, $7 pesos en sus versiones más pequeñas”, comentó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.
En México, 7 de cada 10 personas consumen este pan de muerto que se vende incluso desde el mes de septiembre en el país y que, con el tiempo, se ha preparado con diferentes sabores y rellenos.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el precio del pan de dulce se encareció en un 7.5% en septiembre de 2023 en comparación con el mismo periodo de 2022. Sin embargo, el precio promedio de los 9 meses del año es hasta 14.6% mayor contra el del año anterior.
ANPEC añadió que los gastos totales con motivo de la celebración del “Día de Muertos” presentan una variación de precios del 30.08% al alza, y esto incluye la visita al panteón y colocar un altar y pan de muerto.
En total, refiere, las familias tendrán un gasto promedio por la celebración de entre $1,100 a $1,500 pesos, desglosados así: alimentos y platillos $350-$400, adornos $250-$300, flores $200-$300 y veladoras $150, así como traslados que costarán $250 pesos.