La Fiscalía aseguró que no hay pruebas para descartar que fuera real el atraco denunciado por un ‘youtuber’ en su vivienda del municipio de San Pedro.
Y es que tras el violento robo, la presunta víctima aseguró que su versión fue puesta en duda vía redes sociales.
“No tenemos evidencia de que no haya sido, lo que se indica hasta ahorita es la evidencia del asalto”, informó este miércoles Javier Flores, titular del órgano investigador.
Sin embargo, a pregunta expresa, el fiscal rechazó hablar sobre presuntas irregularidades en el testimonio de los denunciantes.
“Me reservo la conclusión de eso hasta que ya agotemos la indagatoria”, dijo, “hasta ahorita lo tenemos como el asalto que se relata”.
Fue el lunes por la madrugada cuando el creador de contenido habría sido asaltado por al menos cinco hombres armados que entraron a su domicilio, ubicado en el exclusivo sector de Olinaná.
El botín, según se informó, fue de más de $25 millones de pesos en diversos artículos, entre ellos una camioneta de lujo.
El vehículo, un Lamborghini Urus, fue localizado horas más tarde y, de acuerdo con el fiscal, el sistema de posicionamiento global de la unidad no estaba en funcionamiento durante el episodio.
“Tiene una aplicación de GPS que no había sido activada, y cuando se activa da en los sótanos de un centro comercial, pero no indica la ruta que siguieron.
“Se tienen indicios de un vehículo, con las cámaras del C4 y C5, de que aparentemente iba siguiendo seguido por otro vehículo”, detalló Flores.
Cuestionado sobre cómo los delincuentes habrían ingresado a la colonia privada, la Fiscalía aseguró que lo hicieron a través de la serranía.
En ese sentido, reveló que tienen conocimiento de una banda sudamericana que delinque de esa manera en San Pedro.
“Se habla de que habían entrado por la parte trasera del domicilio, que es una zona montañosa ahí.
“Ha habido algunos casos de unas bandas colombianas, es su modus operandi y operan aquí y en Jalisco”, aseveró el fiscal.
Parte del atraco quedó captado durante una transmisión en vivo que realizaba el denunciante Alfredo Valenzuela, y su esposa, la también influencer Dominik Armenta.
