Un monumental Altar de Muertos fue montado por empleados de la Secretaría de Educación (SE) de Nuevo León, en memoria de tres compañeros de la dependencia que ya se adelantaron en el camino.
Para esta tradición, ocuparon todo el espacio del "Auditorio Eva Molina".
Desde hace poco más de veinte años, la Secretaría de Educación instala el Altar de Muertos en memoria de personajes relacionados en el ámbito educativo y con el objetivo de reforzar esta tradición.
Así, se fomenta el sentido de identidad nacional a través del rescate de tradiciones y costumbres mexicanas.
Este año, fue dedicado a la memoria de José Fernando Vásquez Flores, Eduardo Pérez Ruiz y Roberto Jaramillo Flores.

El coordinador de Difusión Cultural de la SE, Rubén Rocha, explicó que este año se dio cumplimiento a la tradición tomando elementos de los altares del estado de Veracruz, donde a la festividad se le conoce como “Xantolo", celebración vibrante que fusiona tradiciones indígenas con elementos católicos.
El funcionario detalló que el altar se diseñó a través de diversos niveles, incluyendo ofrendas de comida, bebidas, flores, velas, imágenes religiosas y objetos personales de los difuntos.
"Recordamos de ellos el trabajo que hicieron y su tiempo de dedicación y entrega. Hacer este homenaje es para seguirlos recordando", expresó.
En la actividad se involucraron al menos 25 empleados, dedicándole tiempo, esfuerzo y recursos.
Para darle mayor vida, algunos colaboradores se caracterizaron de catrinas y catrines, representando el regreso de los muertos.
A la exhibición se invitó a familiares, compañeros y amigos.
La lección es: no hay que celebrar la muerte, sino la vida de quienes ya no están con nosotros.
