Julieta tiene 4 años y debe usar un corsé todos los días. Hace un año le diagnosticaron escoliosis, una curvatura lateral en la columna, que en su caso requiere llevar un corsé a la medida las 24 horas, incluso al dormir, como parte del tratamiento que podría prevenir una cirugía futura.
“Estos corsés se necesitan las 24 horas del día, entonces necesita uno que sea hecho a su medida a ella, específicamente en su caso por ser una escoliosis muy avanzada”.
“Julieta va ha estar cambiando de corsé por muchos años y vamos a ir viendo poco a poco cómo va desarrollándose para ver si el puro corsé le sirve o si requiere de una cirugía”, señaló Lorena Rojas, mamá de Julieta.
Pero conseguir ese corsé no fue fácil pues en Monterrey, y en gran parte de México, no hay especialistas que los fabriquen con las especificaciones médicas necesarias.
Fue en Estados Unidos donde Julieta finalmente accedió al tratamiento adecuado y, además, conoció a un pequeño osito de peluche que la ayudó a adaptarse al uso del corsé.
“Los primeros días sobre todo, a ella le daba miedo, por ejemplo ella veía el corsé y temblaba porque pues es algo invasivo a final de cuentas”.
“Cuando fuimos a la clínica nosotros en Estados Unidos vimos que tenían un osito así y ella se emocionó muchísimo, le encantó, lo agarraba y entonces nos dijeron que ese osito es de una fundación que se llama Higgy Bears, les escribimos y nos mandaron un osito para Julieta; y Julieta ama a su oso, se ve identificada en su oso”, comentó.
Inspirada por lo mucho que ese pequeño detalle ayudó a su hija, Lorena decidió compartir esa experiencia con otros; se unió a la fundación y busca donar ositos con corsé a niñas y niños de Nuevo León y otras partes del país que viven con esta condición.
“Aquí en México no existe ninguna fundación similar, no existen ositos similares. Por eso yo dije, yo quiero ayudar y traer esta alegría que yo veo en mi hija”.
“Para esto mismo hice una página en Instagram que se llama "escoliosisconamor" y ahí en esa página estoy compartiendo mi página de donaciones. Todo se hace en línea entonces yo nada más comparto el link y ya la gente entra ahí y ya ahí pueden elegir qué cantidad si es que quieren donar o simplemente compartir”, explicó.
La iniciativa, llamada Escoliosis con amor, ya ha recaudado fondos para confeccionar y entregar 500 ositos, cada uno con un pequeño corsé.
Cada donativo de 10 dólares se convierte en un abrazo simbólico para un menor que, como Julieta, atraviesa un proceso de adaptación.
“Tratar de ayudar a muchas otras personas, empezando con estos ositos, poder compartir la felicidad que tuvo Julieta cuando ella recibió su osito”.
La fecha límite para la recaudación concluirá en siete días, pues es junio el mes dedicado a crear conciencia sobre la escoliosis.