Ya salió el peine: la Sección 50 de maestros de Nuevo León no sólo mantiene en un estado deplorable los servicios de salud para el magisterio por los manejos corruptos internos, sino que también ha hecho y heredado sus “negocios” ¡en familia!
Y es que ahora se ha revelado que el actual dirigente Juan José Gutiérrez Reynosa recibió como “herencia” contratos con proveedores realizados por su padre Juan José Gutiérrez Duarte, quien fue presidente de la comisión de servicios médicos en la pasada secretaría dirigida por José Luis López Rosas.
Tales “enjuagues” han sido destapados luego de una lluvia de denuncias de maestros por las carencias que están padeciendo en el servicio médico y que — paradójicamente-no están acorde con los montos millonarios que recibe el sindicato en materia de salud.
Las versiones apuntan a que esos “amarres” familiares han sido hechos con empresas “fantasmas” y de dudosa calidad.
Entre ellas están las firmas Médica In-tegralis y Laserex del Norte, propiedad de Alfonso Cepeda Garza, hijo del líder nacional del SNTE, Alfonso Cepeda Salas.
El pasado miércoles, maestros disidentes de la Sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) acusaron que la dirigencia sindical, en manos de Gutiérrez Reynosa, ha hecho pagos por $121 millones de pesos a las empresas Médica Integralis y Laserex del Norte.
El problema, afirmaron, es que hay un conflicto de intereses, pues esas empresas pertenecen a Alfonso Cepeda Garza, hijo del líder nacional del SNTE, Alfonso Cepeda Salas.
Por tal motivo, ese día fueron a Palacio de Gobierno de Nuevo León a pedir que el estado realice una auditoría externa a las finanzas del SNTE en Nuevo León, específi camente de sus servicios médicos.
La líder de los maestros pensionados, Lucilda Pérez Salazar, dijo a INFO7 que el actual líder, Juan José Gutiérrez Reynosa, ha dicho que los contratos no se hicieron en su actual gestión, pues él asumió el cargo el 3 de agosto del año pasado.
Sin embargo, estos pasaron por las manos de su padre, que era el responsable de los servicios médicos con el anterior líder José Luis López Rosas.
Además, acusó Pérez Salazar, el “actual Juanjo”, como identifican al dirigente actual, ya era operador financiero desde la anterior dirigencia.
“El papá estaba en el servicio médico, mal que bien haciendo las cosas ahí y Juanjo lo sabía, fue coparticipe de las negociaciones que hacía el secretario general; Juanjo conocía todo porque era el dedo chiquito de José Luis, él era el operador de José Luis, ahí se formó”, afirmó Pérez Salazar.
Líder sí sabía de las irregularidades
José Luis López Rosas inició su gestión como líder de la Sección 50 del SNTE en marzo del 2017; en ese año fue cuando, según los profesores, se fundó la empresa Laserex del Norte, a la cual se le han pagado $43.7 millones de pesos.
En ese entonces, el papá de “Juanjo” era el secretario de la comisión de servicios médicos y la presidenta era la profesora Teresa Flores Treviño, pero esta falleció el 15 de octubre del 2019, por lo cual Gutiérrez Duarte subió al cargo y desde ahí conoció las firmas de los contratos.
En tanto, su “Juanjo” era el Secretario de Orientación Ideológica del comité magisterial. Lucilda Pérez Salazar afirma que, además de la posición de su padre, Gutiérrez Reynosa fue el “pupilo” del exlíder López Rosas.
“Todo era con Juanjo porque era delegado, le delegaban todas las cuestiones administrativas, las políticas fuertes, esa las resolvía el secretario General, pero las conoce el otro.
“Lo conocía tanto por su papá y porque era el operador administrativo directo del secretario general, José Luis López Rosas, él es su pupilo, lo formó para eso, para que lo sucediera”, afirmó.
Con información de elhorizonte.mx