Don Jorge Solís Hernández le ha dedicado gran parte de su vida a una pasión: la venta de discos de vinilo, y calcula tener más de 20 mil acetatos entre LP y de corta duración.
En más de tres décadas, este comerciante regio es ejemplo de constancia y de amor por lo que hace porque, aunque la modernidad ya desplazó a los vinilos, él sigue fiel a los acetatos.

Es un convencido de la calidad de la música que a través de ellos se reproduce, y así continúa con la venta de vinilos en su local en el Mercado Díaz Ordaz, en la avenida Morones Prieto y Querétaro, a un costado del Puente del Papa, en la colonia Independencia, en Monterrey.
Todo el disco de vinilo que usted ande buscando, ya sea de larga o corta duración, seguramente don Jorge lo tiene, en su negocio en el segundo piso de ese icónico mercado.
Y si ahí no lo tuviera, lo busca en un almacén donde guarda muchos de los ejemplares pues en su local ya no caben.

Tiene muchas curiosidades y "joyas” musicales, es decir, discos únicos que seguramente nadie tiene.
La nostalgia vive en su local, y él sigue en lo suyo: la venta de acetatos para quienes buscan un disco que sea ejemplar del pasado
