El titular de Agua y Drenaje, Juan Ignacio Barragán, aseguró que los problemas de agua en Nuevo León quedarán resueltos, pero van paso a paso.
Al menos de los 700 reportes que se recibieron este viernes por la falta de agua, ahora solo hay 9 quejas, el servicio del vital líquido fue devuelto en un 98%.
Señaló que el Plan Maestro del Agua se está ejecutando y al concluir la etapa 1 que contempla en primera instancia el Cuchillo II, vendrán las reparaciones necesarias para la antigua infraestructura del Cuchillo I, Cerro Prieto y Anillo Monterrey 5.
"En esta primera etapa, asegurar el abastecimiento, ya va muy avanzado el Cuchillo II, la construcción de la presa Libertad, esta primera etapa la vamos a estar concluyendo este año, la modulación de presiones también".
"En la medida que esta primera etapa quede satisfecha vamos a comenzar a darle más énfasis a la segunda etapa", dijo.
Sostuvo que el proceso debe ser así, porque para reparar imperfecciones en los acueductos, estos deben parar, dejando sin agua a la población.
"Lo más importante, es que para darle mantenimiento a estos dos acueductos, necesitamos tener el Cuchillo II, no podemos apagar Cerro Prieto para darle mantenimiento, porque un mantenimiento mayor a un acueducto, no es una cuestión de 2, 3 días, un mantenimiento mayor es tenerlo apagado 4, 5 meses, sería una catástrofe, igualmente el Cuchillo l".
"Entonces a estos dos acueductos no les podemos dar el mantenimiento mayor, hasta que esté terminado el Cuchillo ll", expresó.
Los arreglos serán parciales, debido a la falta de recursos, pero aseguró que con la reparación de un tramo de al menos 8 kilómetros al año, en esta administración, las reparaciones quedarían concluidas.
"No podemos prescindir hoy día de alguno de estos acueductos para darle un mantenimiento mayor", puntualizó.
Las deficiencias en el Cuchillo I, son pequeñas fugas que desperdician de 10 a 30 litros por segundo, mientas que en Cerro Prieto hay tramos fisurados, algunos no visibles.
Una vez realizados los arreglos, Nuevo León tendrá una mejor infraestructura para el abastecimiento, contemplando la capacidad necesaria del vital líquido y correcta distribución en el estado.
El costo del mantenimiento no se tiene claro, sin embargo, Barragán adelantó que se podrían superar los 2 mil millones de pesos, que serán financiados por la propia paraestatal dentro de su capacidad de endeudamiento.