Muchas colonias se quedaron sin el servicio de agua, luego del paso de la tormenta tropical Alberto por Nuevo León.
Pero las lluvias aún siguen presentes de manera intermitente, esto da una posibilidad para que las personas puedan recolectar agua.
Pero ¿Cómo se puede recolectar este recurso de las lluvias?
1.- La primera opción y la más sencilla puede ser tan solo colocando baldes o cubetas en la intemperie, esperando recolectar la mayor cantidad de agua posible.
2.- A través de tuberías o canaletas conectadas desde el techo de tu casa, para que, en lugar de caer como goteras por las orillas del techo, esta sea dirigida a un recipiente adecuado.
3.- Otra opción más rustica, podría ser aprovechar el escurrimiento de laderas o paredes, ya sea colocando un recipiente pegado al muro o por medio de una tela que haga la función de goteo a un balde.
Estas opciones pueden ser de mucho beneficio para las comunidades que están incomunicadas o sin el suministro de agua, pero es necesario advertir que esta agua no es potable.
Al recuperar el agua de la lluvia, esta cae limpia, pero por su paso en muros techos o suelos, arrastra consigo partículas de polvo o basura, por ello, también es importante filtrar el agua que se recolecte y posteriormente hervirla para eliminar cualquier bacteria.
Los filtros recomendados por expertos para potabilizar el agua de lluvia son por piezas de barro, carbón activado y la plata coloidal, claro después de recibir un tratamiento de cloro.
Pero esta agua también puede ser reutilizada para regar plantas o lavar superficies u objetos, descargar inodoros, disminuyendo el consumo del suministro local.