INFO7 - Tienen aspecto demoniaco e intimidante.A los automovilistas les piden una cooperación para permitirles transitar.Mientras que a hombres y mujeres los invitan a bailar.Lo hacen para tener buenas cosechas, según su tradición.Ellos son los ‘Chicaleros’.Emilio Lara es uno de ellos, desde hace 40 años participa en esta fiesta."La mascara significa más que nada que como estamos ahorita en la resurrección de Cristo, esto significa que el demonio anda suelto".Tomaron su nombre del platillo ‘Chical’ el cual se elabora con granos de elote y otras especias."Un español nos trajo esta tradición, él fue el que nos trajo esta tradición aquí a San Francisco de los Blancos, dicen que salía ahí en la carretera y se paraba solo con una máscara ahí", recuerda Lara.Su origen data de aproximadamente 250 años y nació en la comunidad de San Francisco de los Blancos, ubicada en el municipio de Galena, Nuevo León.Hoy se expandió a diferentes zonas, cuenta Roberto Mendoza, un ‘Chicalero’ retirado."Los chicaleros desde un principio cuando yo estaba chico, ellos comenzaban a salir, entonces se hacía el borlote grande".Esta tradición ha prevalecido de generación en generación, como en el caso de la familia Lara."Yo traigo la tradición aquí en las venas, porque me siento orgulloso, aparte eso me da mucho ánimo a mi porqué viene mucha gente de afuera y se van contentos".Desde el miércoles de cada Semana Santa salen a las calles y lo hacen así hasta el Sábado de Gloria.Su peculiaridad atrae a visitantes de todas partes.Aunque la tradición se ha expandido, muchos de los ‘chicaleros’ se reúnen a la orilla de la Laguna de Labradores.Como en un principio, los Chicaleros visten un pantalón elaborado con ixtle, camisa, su tradicional máscara y un chixote en la mano.Pero sobre todo con sales a las calles con muchas ganas de preservar su identidad.