La familia del bebé que murió tras la inundación de su vivienda al sur de Monterrey tiene todo el derecho de exigir una investigación para determinar si existen responsables por la tragedia, así lo aseguró el experto legal, Alejandro Navarro.
En entrevista para INFO7, el abogado destacó que las estructuras colapsadas por las precipitaciones deben ser sometidas a un peritaje.
“Entiendo que existe una barda que fue derrumbada por la fuerza de las lluvias y el agua que se fue acumulando”, recapituló, “entonces deberíamos tener la opinión experta para establecer si desde la construcción de la estructura se tenían los requerimientos técnicos necesarios para soportar una situación de esta naturaleza.
“Se tendría que determinar si las obras tenían el material adecuado y calidad necesaria”, explicó el litigante.
De esa manera, dijo, se podría confirmar si existió algún tipo de negligencia que desencadenara la tragedia.
“Si se llegara a comprar una situación de esa naturaleza a través de los dictámenes pues eso pudiera ser tendiente a demostrar una cuestión de omisión o falta de cuidado de quienes construyeron esas bardas.
“Por ende, les depararía una responsabilidad para indemnizar propiamente a las víctimas y a los afectados”, detalló.
En ese sentido, explicó que la exigencia de investigaciones está respaldada por la Carta Magna, y es un derecho innegable.
“A raíz de la reforma del 2011 en materia de derechos humanos de nuestra Constitución, se constitucionalizó el derecho de recibir una reparación integral con relación a daños sufridos; eso está garantizado por el Estado.
“Propiamente en nuestra Constitución, en el artículo primero, párrafo tercero, se establece que el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones”, enfatizó.
Para lograr hacer válida la petición, agregó, se deberá solicitar un juicio que podría ir incluso a la par de alguna demanda penal.
“Tenemos la posibilidad de reclamar daños a través de una figura que se llama responsabilidad civil, y se puede instar a través de un juicio oral, que tiene una ventaja de ser acortado en plazos y tiempo para poder llegar a una determinación de parte del juzgador”, finalizó.
Fue durante las fuertes precipitaciones del 25 de septiembre cuando el Fraccionamiento Catujanes, donde vivía el bebé, sufrió inundaciones.
Una barda de concreto que hacía de límites con la colonia Bosques del Vergel terminó por colapsar, provocando una rápida llegada de grandes cantidades de agua que se infiltró y causó daños en viviendas.