Las frases de mamá que nos formaron: un homenaje este 10 de mayo

Este Día de las Madres, rendimos homenaje a ese repertorio de sabiduría cotidiana que muchas veces nos hizo rodar los ojos, pero que recordamos o las repetimos
“¿Y si tus amigos se avientan de un puente, tú también?”, “Abrígate, no vayas a agarrar frío”, o el clásico “Mientras vivas en esta casa…” son frases que han cruzado generaciones. Este Día de las Madres, rendimos homenaje a ese repertorio de sabiduría cotidiana que muchas veces nos hizo rodar los ojos, pero que hoy recordamos con una sonrisa… y hasta las repetimos.
Las madres mexicanas no solo educan, cuidan y trabajan incansablemente, también tienen un lenguaje propio: un código afectivo lleno de advertencias, amor, regaños y enseñanzas.
Frases clásicas de mamá que todos llevamos en el corazón:
-“Te lo digo por tu bien.”
-“Uno no es monedita de oro para caerle bien a todos.”
-“¡Esa carita se te va a quedar así si sigues!”
-“Llévate un suéter, por si acaso.”
-“¿Crees que soy tu sirvienta?”
-“Cuando tengas hijos, me vas a entender.”
-“Mientras vivas en esta casa, se hace lo que yo diga.”
-“Porque soy tu madre y punto.”
-“¿Quién crees que va a recoger eso?"
-“¿Ya le diste las gracias a la señora?”
Más allá de lo anecdótico, estas frases reflejan una forma de crianza, muchas veces marcada por el esfuerzo, el sacrificio y la preocupación constante. Son parte de la identidad familiar y, al mismo tiempo, parte del humor popular.
Este 10 de mayo, además de los regalos, los desayunos y los abrazos, es un buen día para recordar esas frases que nos enseñaron a ser quienes somos. Porque si bien cada madre es distinta, todas tienen esa capacidad de quedarse con nosotros incluso en una sola frase.
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