Tiene un aborto y mata a su amiga para robarle a su bebé
Erika tuvo un aborto espontáneo en 2017 por lo que mató a su amiga Carolina, madre de cinco hijos, porque quería robarle a su bebé de 6 semanas.
Una mujer de Houston, Texas que mató a su amiga y secuestró a su bebé se declaró culpable de asesinato y fue sentenciada a 40 años de prisión esta semana.
Erika Miranda-Álvarez , de 35 años, fue acusada originalmente de asesinato capital por apuñalar mortalmente a Carolina Flores-Miranda, de 33 años, para poder robar a su hija, Shamali, de 6 semanas, en 2017.
El martes, Miranda-Álvarez se declaró culpable de un cargo menor de asesinato.
"Este fue un asesinato y secuestro premeditado que nunca debería haber ocurrido", dijo el fiscal de distrito del condado de Harris, Kim Ogg.
Los familiares encontraron el cuerpo de Flores en su departamento el 19 de diciembre de 2017 y se dieron cuenta de que el bebé había desaparecido.
Se emitió una Alerta AMBER y varias agencias policiales se unieron a una búsqueda exhaustiva de dos días. Los oficiales encontraron al bebé ileso con Miranda-Alvarez en su departamento en South Gessner. También encontraron dos pulseras de hospital en el bolsillo de la acusada. Uno decía Carolina Flores y el otro decía Shamali Flores.
Las mujeres habían estado embarazadas al mismo tiempo, pero Miranda-Álvarez tuvo un aborto espontáneo y no se lo contó a nadie.
Los fiscales dijeron que ella planeó el crimen, incluyendo mentirle a Flores días antes de matarla, diciéndole que ella también había dado a luz. Todo era parte del complot de Miranda-Álvarez para robar el bebé de la víctima y hacerla pasar como propia.
Cuando arrestaron a Miranda-Álvarez, afirmó que encontró a Flores muerta pero que no la mató.
Miranda-Álvarez debe cumplir al menos la mitad de la pena de prisión antes de poder optar a la libertad condicional. No puede apelar la condena ni la sentencia.
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