Revista Time pone a Elon Musk tras el escritorio de Trump

La revista Time ha generado revuelo con su más reciente portada, en la que aparece Elon Musk sentado detrás del escritorio Resolute del Despacho Oval, una imagen que podría interpretarse como una provocación directa al presidente Donald Trump. La portada, de fondo rojo, muestra al multimillonario con una taza de café en mano, en un contexto que sugiere su influencia en la administración actual.

El artículo adjunto, escrito por Simon Schuster y Brian Bennett, destaca el poder que Trump ha otorgado a Musk y a su Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) para reducir la plantilla federal, un mandato que ha enfrentado obstáculos legales recientes.

Los autores señalan que Musk parece no rendir cuentas a nadie más que a Trump, quien le ha dado amplia libertad para alinear el gobierno con su agenda.

Esta es la segunda vez en meses que Musk aparece en la portada de Time, tras ser destacado en noviembre como un "hacedor de reyes" por su influencia en las elecciones presidenciales.

Ambas portadas insinúan que Musk, y no Trump, podría ser el verdadero poder detrás de la administración, una idea que podría irritar al presidente, conocido por su deseo de mantener el control y su fascinación por la revista.

Trump, al ser consultado sobre la portada, bromeó: "¿Sigue en el negocio la revista Time? Ni siquiera lo sabía". Sin embargo, su relación con la publicación ha sido significativa, habiendo sido elegido dos veces como "Persona del Año" y aparecido en múltiples portadas.

La portada actual evoca comparaciones con la cobertura de Time sobre Steve Bannon en 2017, cuando se le describió como el "gran manipulador" detrás de la primera administración de Trump. Aquella percepción contribuyó a la caída de Bannon, y algunos especulan que la revista podría estar intentando generar una dinámica similar entre Trump y Musk.

Hasta ahora, Musk ha evitado comentar sobre la portada, a pesar de su habitual actividad en redes sociales. Su papel en el gobierno de Trump, particularmente en la reducción de personal federal, ha sido comparado con su enfoque agresivo al tomar el control de Twitter en 2022.

La portada de Time no solo refleja la influencia de Musk, sino que también plantea preguntas sobre la dinámica de poder dentro de la administración Trump, en un momento en que el presidente busca consolidar su autoridad.

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