Las autoridades del municipio de Blendon, Estados Unidos, han hecho público un impactante video que muestra a unos de sus agentes disparando mortalmente a una joven negra embarazada a través del parabrisas de su vehículo.
El trágico incidente ocurrió después de que la joven, Ta’kiya Young, de 21 años, fuera acusada de robar botellas de alcohol en una tienda de comestibles. Tanto Young como su feto perdieron la vida debido al disparo.
Body cam footage released in fatal Ohio police shooting of pregnant woman Ta’Kiya Young and her unborn baby. Young was reportedly accused of shoplifting. pic.twitter.com/oMa9cHnjqP
— Dr. Jeffrey Guterman (@JeffreyGuterman) September 1, 2023
El video, capturado por la cámara corporal del agente que disparó, comienza cuando Young se encuentra dentro de su vehículo en el estacionamiento de un centro comercial en Westerville, un suburbio al norte de Columbus.
El agente junto a la puerta del conductor le ordena repetidamente a Young que salga del vehículo, mientras otro oficial con una cámara corporal se coloca frente al automóvil. La joven, madre de dos niños de 6 y 3 años, niega haber robado y se niega a abandonar el vehículo. En un momento dado, el agente que está frente al vehículo apunta su arma hacia la joven embarazada mientras le ordena que salga del automóvil.
Cuando el vehículo comienza a moverse, el agente dispara un tiro contra Young. Tras el disparo, el automóvil se desplaza lentamente y colisiona con el centro comercial, mientras Young yace en el asiento del copiloto.
El jefe de Policía de Blendon, John Belford, anunció que el oficial que realizó el disparo mortal ha sido puesto en baja administrativa y ha solicitado una investigación independiente por parte de la Oficina de Investigación Criminal de Ohio. El retraso en la publicación del video se debió a la necesidad de cumplir con las leyes estatales y permitir su revisión legal.
Este incidente pone de relieve las acusaciones de violencia policial desproporcionada hacia la población negra en Estados Unidos.
Según datos de Mapping Police Violence, en 2022, la Policía mató a al menos 1,201 personas en el país, y el 26 % de las víctimas eran afroamericanas, a pesar de representar solo el 13 % de la población. Organizaciones de derechos humanos han denunciado repetidamente esta preocupante tendencia.