Mexicana se niega a declarar por robo de vinos en España

La joven mexicana y el hombre acusados de un robo de botellas de vino de gran valor en un famoso restaurante en España, valoradas en más de 1.6 millones de euros, se negaron este lunes a declarar en el juicio contra ellos en la ciudad española de Cáceres.Priscila Guevara, mexicana de 28 años, y Constantin Dumitru, de 48 y con nacionalidad rumana y neerlandesa, están acusados del robo de 47 botellas, con precios estimados en hasta 350,000 euros, en octubre de 2021 en el restaurante-hotel Atrio de Cáceres, que tiene tres estrellas Michelin.“No tengo nada que declarar, a la defensa sí”, dijo brevemente Dumitru, antes de que su abogada rechazara también hacerle preguntas, mientras que Guevara mantuvo la negación a responder a ningún abogado en su derecho a no declarar.Ambos no reconocieron su culpabilidad al ser preguntados por el juez y optaron por guardar silencio, en el juicio en el que están acusados de un delito de robo con fuerza, agravado por el alto valor de los vinos, por lo que se enfrentan a una petición de pena de la Fiscalía de cuatro años y seis meses de prisión y una indemnización para los perjudicados de 1,648,500 euros.La acusación particular, representada por la aseguradora de las botellas, que ya indemnizó a los propietarios del restaurante, eleva la pena a cinco años y un mes de prisión y pide una indemnización de 700,000 euros.La defensa pide la libre absolución, al entender que los derechos fundamentales de sus clientes fueron vulnerados, por lo que insta a la nulidad del procedimiento.Según la Fiscalía, ambos se alojaron en el hotel, realizaron una visita guiada a la bodega y de madrugada, aprovechando que el empleado de recepción estaba solo, la joven pidió que llevara comida a la habitación mientras el hombre se apoderó de una llave maestra con la que abrió la bodega, sustrajo las botellas y horas después dejaron el hotel.Ambos fueron detenidos en julio de 2022 en un puesto fronterizo de Croacia procedentes de Montenegro y están en prisión desde entonces, sin que hayan aportado luz sobre el paradero de las botellas, entre ellas un Chateau d´Yquem que podría alcanzar un precio de 350,000 euros.El juicio prosigue con la declaración de testigos, como policías, peritos judiciales y empleados del restaurante, entre ellos sus dueños, José Polo y Toño Pérez. 

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