La Tierra se encuentra actualmente afectada por una intensa tormenta geomagnética desencadenada por una eyección de masa coronal directamente impactando nuestro planeta.
Por su parte, El Centro de Predicción del Clima Espacial (SWPC) de la NOAA elevó las alertas y estado vigilante desde el sábado ante este fenómeno.
Se esperan diversos efectos, incluyendo la posibilidad de avistamiento de auroras boreales en latitudes poco comunes, así como interrupciones en las redes de comunicación y sistemas de navegación.
Según la NOAA, una eyección de masa coronal (CME) es una expulsión vigorosa de plasma y material magnético desde la superficie del Sol, que puede alcanzar la Tierra en un lapso de 15 a 18 horas.
Bill Murtagh, coordinador de programas del SWPC, la describe como el Sol lanzando un imán al espacio. Este evento ha generado gran interés científico debido a su capacidad para interactuar con el campo magnético terrestre, lo que resulta en las impresionantes auroras boreales al entrar en contacto con las moléculas de oxígeno y nitrógeno en los polos.
BREAKING: A severe (level 4 out of 5) geomagnetic storm is currently affecting Earth. The fast-moving CME hit more than 12 hours earlier than anticipated.
— Matthew Cappucci (@MatthewCappucci) March 24, 2024
Auroras are likely visible across much of Europe and Asia, including northern mid-latitudes.
Will it hold into U.S. night? https://t.co/n5epI5OkdU pic.twitter.com/342jKyaZj6
Las tormentas geomagnéticas, como la reciente clasificada como G4 por la NOAA, representan más que un espectáculo de luces en el cielo. Estos eventos tienen el potencial de interferir con satélites, sistemas de navegación, comunicaciones y la red eléctrica.
La escala de clasificación de la NOAA, que va de G1 a G5, indica la intensidad de estas tormentas, siendo G5 el nivel máximo que podría llevar auroras boreales hasta regiones como Florida y Texas.
Cabe destacar que los efectos de la tormenta geomagnética pueden diferir según la ubicación geográfica, siendo más pronunciados en regiones cercanas a los polos como el Ártico o la Antártida.