EUA y Rusia buscan armas con Corea del Sur y Corea del norte
En medio de la desesperación por abastecerse de municiones para el conflicto, en Ucrania, Estados Unidos y Rusia han recurrido a Corea del Norte y Corea del Sur, dos naciones que han mantenido vastos arsenales de armas desde la Guerra de Corea hace siete décadas.
Recientemente, el presidente ruso, Vladimir Putin, se reunió con el líder norcoreano, Kim Jong-un, y se informa que llegaron a un acuerdo de cooperación, aunque no se esperaba que anunciaran públicamente un acuerdo específico sobre armas. A pesar de que tanto Rusia como Corea del Norte violarían las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas al comprar armas o apoyar los programas armamentísticos, parece que están encontrando intereses comunes en su oposición a Estados Unidos y sus aliados.
Además de Rusia, Estados Unidos también ha buscado ayuda en la península coreana, con Corea del Sur enviando discretamente grandes cantidades de proyectiles de artillería a su aliado estadounidense. Aunque Corea del Sur insiste en que no proporciona armas letales directamente a Ucrania, sus envíos al ejército estadounidense han ayudado a liberar existencias que Ucrania puede utilizar en el conflicto contra Rusia.
La persistente situación de conflicto en la península coreana ha llevado a ambas Coreas a mantener grandes arsenales de armas y una carrera armamentista continua.
Corea del Norte, a pesar de su aislamiento y pobreza, ha priorizado el fortalecimiento militar y ha desarrollado sus misiles a partir de tecnología soviética y, se cree, a través del mercado negro ucraniano. También ha obtenido ingresos vendiendo armas a otros países como Siria e Irán.
Corea del Sur, por otro lado, ha construido su industria de defensa a partir de armas proporcionadas por la ayuda militar estadounidense y ha aprovechado la tecnología rusa. Además, ha logrado importantes contratos de exportación de armas, en parte debido a la demanda generada por el conflicto en Ucrania.
La demanda de municiones de artillería en Ucrania es particularmente alta, y Corea del Norte posee un enorme suministro de proyectiles de artillería, lo que la convierte en una fuente atractiva para Rusia. Aunque se desconoce cuánto tiempo tomaría para que Corea del Norte proporcione las cantidades necesarias de municiones, se estima que tiene decenas de millones de proyectiles almacenados.
El acuerdo de armas entre Kim y Putin podría tener implicaciones más allá del comercio de armas y señala un posible cambio en la política de Corea del Norte hacia una mayor alineación con Rusia y China contra Estados Unidos.
Sin embargo, existen dudas sobre si Rusia proporcionará a Corea del Norte tecnología avanzada para mejorar sus misiles balísticos intercontinentales o construir submarinos nucleares. La confianza entre Rusia, Corea del Norte y China sigue siendo baja, lo que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de una alianza real entre los tres países en este contexto.
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