Bebé declarado muerto 'resucita' antes del entierro
La abuela del bebé que fue declarado muerto notó que el pequeño aún mostraba signos de vida justo antes de ser enterrado.
En un sorprendente episodio que involucra a la medicina, dos trabajadores de la clínica de La Misericordia en La Peña, en el Atlántico , se encontraron en una situación desconcertante cuando un bebé, previamente declarado muerto, mostró signos de vida justo antes de ser sepultado.
La historia, que algunos expertos califican como un caso potencial de negligencia médica, se remonta al 19 de septiembre cuando una joven madre de 22 años asistió a un control prenatal. El médico que la atendió detectó que el bebé carecía de signos vitales y, con el objetivo de evitar complicaciones para la madre, decidió inducir el parto de inmediato. Inicialmente, intentaron la inducción con inyecciones, pero luego optaron por una cesárea, sorprendiendo a los padres de la bebé, que tenía solo siete meses de gestación.
El personal de la clínica de La Misericordia impidió que la familia tuviera contacto con la recién nacida y procedió a enviarla a la morgue, además de ofrecerles un servicio funerario costoso que estaba fuera de su alcance.
Sin embargo, el miércoles 20 de septiembre, la familia pudo ver al bebé en la morgue, y la abuela notó que aún mostraba signos de vida mientras yacía en el féretro que estaba a punto de ser llevado al cementerio.
“Tenemos pruebas que sí tenía vida porque abrió la boquita, defecó, movía las manitas y botó sangre”, afirmó Elisa Herrera, pariente de la madre.
Ante este descubrimiento impactante, contactaron al médico local, Alexis Díaz, quien confirmó que el bebé tenía signos vitales, aunque muy debilitados. A pesar de sus esfuerzos, no pudo realizar maniobras de reanimación adecuadas debido a la falta de equipo médico adecuado en el lugar.
“Tenía sangrado activo por el cordón umbilical y tenía ritmo cardiaco demasiado disminuido. El niño se ensució y se le salieron las lágrimas. Tenía movimientos mínimos de las manitas”, declaró el médico a la Emisora Atlántico.
A pesar de sus esfuerzos, el bebé murió debido a que el doctor no pudo ejecutar maniobras de reanimación adecuadas debido a la falta de equipo médico adecuado en el sitio y la compleja situación de salud que presentaba el menor de edad.
Las autoridades locales, incluyendo a los secretarios departamentales y distritales de Salud, Alma Solano Sánchez y Humberto Mendoza Charris, respectivamente, están desconcertadas por cómo el personal médico pudo pasar por alto los signos de vida del bebé.
Se ha anunciado una investigación sobre el incidente, y la clínica de Barranquilla donde ocurrió el incidente también será sometida a un escrutinio riguroso para esclarecer las circunstancias que rodearon este misterioso episodio médico.
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