Amenaza para TikTok: ¿Qué implicaría la posible venta?
La aprobación de un proyecto de ley en EUA podría obligar a ByteDance, la empresa matriz de TikTok, a vender la aplicación a una compañía de otra nacionalidad.
La popularidad de TikTok es innegable, pero su relación con China ha generado preocupaciones entre los políticos.
Este 13 de marzo, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley que podría obligar a ByteDance, la empresa matriz china de TikTok, a vender la aplicación a una compañía de otra nacionalidad para evitar una prohibición en el país norteamericano, su mercado más grande.
Además de Estados Unidos, otros países como Gran Bretaña, Francia y Australia están implementando sus propias restricciones.
Esto significa que TikTok, considerada la aplicación más descargada del mundo en algunas métricas, podría enfrentarse a su desaparición de las pantallas si no corta sus lazos con China.
TikTok bajo amenaza: posibles repercusiones si ByteDance se niega a vender
Básicamente, el proyecto de ley requiere que TikTok sea vendido dentro de los próximos seis meses a un comprador aprobado por el gobierno de Estados Unidos.
Esta venta deberá asegurar que ByteDance ya no tenga ningún tipo de control sobre TikTok ni sobre los algoritmos que recomiendan contenido a los usuarios.
En caso de que ByteDance no pueda o se rehúse a vender TikTok, sería considerado ilegal que las tiendas de aplicaciones y las empresas de alojamiento web distribuyan o actualicen la aplicación en Estados Unidos.
El Departamento de Justicia tendría la autoridad para imponer sanciones a cualquier empresa que colabore con TikTok o facilite la descarga de su aplicación.
Por su parte, TikTok argumenta que las preocupaciones son infundadas, destacando que aproximadamente el 60% de la compañía pertenece a inversores institucionales globales, incluidos grandes nombres financieros como Susquehanna International Group y BlackRock.
Además, señala que tres miembros de su junta directiva son estadounidenses, de un total de cinco. La empresa asegura haber invertido más de mil millones de dólares en un plan que almacena los datos confidenciales de los usuarios estadounidenses en servidores administrados por Oracle, una empresa estadounidense de computación en la nube.
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