La animación nacional da un salto histórico con el estreno de Soy Frankelda, la primera película mexicana realizada completamente en stop-motion. Después de cuatro años de intenso trabajo artesanal, los hermanos Arturo y Roy Ambriz presentan esta producción que se distingue por su identidad mexicana, creatividad en la narrativa y diseño visual único. La cinta busca alejarse de los estándares hollywoodenses y ofrecer al público una experiencia auténticamente mexicana, tanto en la construcción de sus personajes como en su estética.

La historia se sitúa en el México del siglo XIX y sigue a Francisca, una joven con el sueño de convertirse en escritora. En una sociedad marcada por el machismo y la desaprobación hacia las expresiones artísticas, su talento se ve relegado al olvido. Inspirada en Mary Shelley, autora de Frankenstein, Francisca regresa como fantasma para contar las historias que nunca pudo compartir en vida, revelando la fuerza de la voz femenina en una época que buscaba silenciarla.
El proceso creativo fue completamente artesanal. Para dar vida a la historia, se construyeron 140 marionetas y 50 escenarios distintos, todos elaborados desde cero por un equipo íntegramente mexicano. Cada detalle, desde la caracterización hasta la ambientación, refleja un compromiso con la identidad cultural y la creatividad local.
¿Cómo apoyó Guillermo del Toro al proyecto?
El director de películas como El Laberinto del fauno y Pinocchio, Guillermo del Toro, acompañó al equipo durante las etapas finales de producción, brindando consejos, recomendaciones para la distribución y seguimiento constante a través de videollamadas. Gracias a su respaldo, los realizadores pudieron superar los desafíos de presupuesto y logística que enfrentó la película.
Con su estreno en cines, Soy Frankelda invita al público a apoyar el cine nacional y disfrutar de una historia que combina historia, fantasía y creatividad mexicana. Sus creadores destacan que el primer fin de semana es clave para dar visibilidad a un proyecto que representa un hito en la animación del país.
