La Policía Nacional española detuvo en Málaga a un joven de 19 años por presuntamente amenazar de muerte en redes sociales al futbolista de la selección española Álvaro Morata y su familia después de que el jugador falló un penalti decisivo en la Nations League ante Portugal.
Las amenazas graves se profirieron desde la cuenta personal del investigado en una conocida red social y no solo iban dirigidas contra el futbolista, también contra sus hijos y tuvieron una enorme repercusión en Internet, según ha informado este martes la Policía.
Alice Campello, influencer y pareja del jugador, denunció públicamente los hechos a través de Instagram.
La empresaria italiana mostró en sus redes varias imágenes que reflejaban el acoso de diferentes usuarios a través de mensajes privados que han ido llegando a su cuenta durante las últimas horas.
Apenas dos días más tarde de la difusión de las amenazas en Internet, un joven se presentó en la Comisaría Provincial de Málaga para denunciar que unos desconocidos le habían "robado" su cuenta personal en una red social.
De manera paralela, los agentes adscritos a la Sección de Ciberdelincuencia corroboraron que la cuenta a la que se refería el denunciante era la misma desde la que se habían vertido las amenazas contra el futbolista profesional.
Continuando con las pesquisas, los investigadores apreciaron incongruencias en el relato del denunciante, quien al parecer había intentado instrumentalizar la denuncia al fin de crear una coartada para desvincularse de los hechos.
Análisis del teléfono del sospechoso
La Policía Nacional intervino el teléfono móvil del joven y, durante su análisis, se hallaron evidencias que demostraban que efectivamente esta persona había sido el presunto autor de los hechos.
La Policía advierte en un comunicado de que la repercusión de este incidente pone de manifiesto la creciente preocupación por el acoso y las amenazas en línea.
"Estas conductas se han normalizado en algunos ámbitos, como el deportivo, favorecidas por el anonimato que proporcionan las redes sociales y la rapidez con la que se propagan", han lamentado.