El fenómeno del presentismo laboral, en el que empleados asisten a trabajar pese a tener problemas emocionales o de salud mental, se ha convertido en una nueva preocupación para las empresas, advirtió la psicóloga Karla Valdés, especialista en salud clínica.
Durante una entrevista, la académica explicó que, aunque el ausentismo tradicional genera pérdidas económicas, el “presentismo” puede tener un impacto hasta tres veces mayor, pues los trabajadores permanecen en su puesto, pero con un bajo nivel de concentración, cansancio y alto riesgo de errores.
“Cuando un trabajador tiene ansiedad, depresión o enfrenta problemas familiares, económicos o de violencia, aunque asista a su empleo, no rinde igual y puede incluso poner en riesgo a otras personas”, señaló Valdés.
La especialista explicó que el fenómeno ha comenzado a ser detectado en distintas empresas de Saltillo, Torreón, Monclova y Piedras Negras, en el marco de la Norma 035, que obliga a los centros laborales a identificar y prevenir riesgos psicosociales.
“Las compañías están reconociendo que los problemas emocionales no solo afectan al individuo, sino al rendimiento y la seguridad colectiva. Por eso ahora buscan estrategias para mitigar el impacto del presentismo”, añadió.
Entre las medidas recomendadas, mencionó la identificación temprana del personal con dificultades emocionales, la reasignación de tareas para evitar riesgos, y la supervisión en equipo, con el fin de ofrecer acompañamiento y apoyo en lugar de sanción o estigmatización.
Valdés también destacó la falta de psicólogos especializados en salud laboral en México, donde apenas hay 6.9 profesionales por cada 100 mil habitantes, según estimaciones nacionales.
“No todos los psicólogos tienen formación clínica para atender crisis emocionales, pero hoy se les exige intervenir en esos casos. Por eso estamos trabajando con el Gobierno del Estado y con universidades para capacitarlos adecuadamente”, explicó.
Finalmente, subrayó que el presentismo es un problema silencioso pero creciente, y que el reto de las empresas no solo será cumplir con la norma, sino crear entornos saludables donde los trabajadores puedan atender su bienestar sin temor a perder su empleo.