Luego del conflicto registrado durante el pasado fin de semana en el Centro de Rehabilitación Coahuila Una Esperanza, ubicado en la colonia Zaragoza, directivos y familiares de internos desmintieron públicamente las presuntas quejas que circularon en redes sociales, las cuales señalaban supuestos malos tratos dentro de la institución.
De acuerdo con testimonios recabados, los hechos ocurrieron alrededor de las 10:00 de la noche, cuando un grupo de personas —familiares de uno de los internos— arribó a las instalaciones con la intención de sacar por la fuerza a su ser querido. En su intento por ingresar, los involucrados causaron diversos destrozos, rompieron puertas, agredieron a trabajadores del centro y presuntamente sustrajeron objetos del lugar.
Ante la difusión de versiones no confirmadas sobre supuestos abusos al interior del centro, varios familiares entrevistados señalaron que dichas afirmaciones son falsas.
“Este centro tiene reglas muy estrictas y eso ha ayudado mucho a nuestros hijos. Nosotros mismos los hemos traído en más de una ocasión porque confiamos en el trabajo que aquí se realiza”, expresó uno de los padres.
Otra madre de familia compartió: “Mi hijo lleva aquí varios meses y ha tenido un cambio muy positivo. No hemos tenido ninguna queja del trato que recibe. Siempre nos han informado puntualmente de su avance”.
Una hermana de un interno mencionó: “Lo trajimos por voluntad propia porque ya no podíamos solos. Aquí nos han dado seguimiento y apoyo. Jamás hemos visto o sabido de maltratos”.
“Nosotros venimos a las juntas familiares, y vemos cómo trabajan. Los muchachos están organizados, tienen actividades y siguen una rutina. Si algo no nos pareciera, no estaríamos trayendo a nuestros familiares”, comentó otro testimonio.
Los directivos informaron que ya se presentó la denuncia correspondiente ante las autoridades por los daños ocasionados y el robo de bienes, y reiteraron su compromiso con la recuperación de quienes ahí reciben tratamiento.
El Centro de Rehabilitación Coahuila Una Esperanza ha operado durante varios años con medidas firmes en su modelo terapéutico, mismo que ha sido respaldado por numerosas familias que han encontrado en la institución una alternativa para la atención de adicciones.