Luego de la agresión sufrida por el maestro Héctor a manos de un alumno de apenas 15 años, quien lo atacó con una manopla, líderes sindicales de las secciones 5, 38 y 35 del SNTE cerraron filas para exigir mayores garantías de seguridad en las escuelas del estado.
La violenta agresión ha encendido las alarmas entre el magisterio, que hoy exige condiciones dignas y seguras para ejercer su labor sin temor a ser atacado por estudiantes o padres de familia.
Everardo Padrón, dirigente de la Sección 5 del SNTE, asumió la responsabilidad sindical en este caso, mientras que Isela Luégano, líder de la Sección 38, expresó su respaldo total, recordando que maestros afiliados a su sección también enfrentaron hechos similares meses atrás.

Ambos coincidieron en que la violencia en los planteles es un problema creciente que no debe normalizarse ni minimizarse.
Desde la Sección 35, su dirigente advirtió que por la cercanía con zonas donde ya existen amenazas a maestros, es urgente tomar medidas preventivas. “Levantamos la voz antes de que una tragedia mayor ocurra.
No vamos a esperar a que un maestro pierda la vida por no atender este tema a tiempo”, sentenció. Los líderes sindicales hicieron un llamado a las autoridades educativas y de seguridad para establecer protocolos claros de protección y garantizar que las escuelas sigan siendo espacios de aprendizaje y no de violencia.