Abuelitos quieren ayudar a mejorar parque en Saltillo 

A pesar del paso de los años, Hermin Alvarado y Catarino Rodríguez no han perdido las ganas de ayudar. 

Ambos vecinos de la colonia Bellavista han decidido tomar acción ante el abandono en el que se encuentra el parque Jesús Carranza, ubicado en ese mismo sector.

Desde hace varios meses, el lugar ha sido descuidado, según señalan vecinos y ciudadanos que acostumbran acudir a pasar un rato agradable en sus áreas verdes. La hierba crecida, la basura acumulada y el deterioro general del espacio han hecho que la comunidad comience a expresarse con preocupación. 

Sin embargo, estos dos hombres, ya de edad avanzada, decidieron no quedarse de brazos cruzados.

“Nosotros venimos seguido, y nos duele ver el parque así. Por eso, con lo poquito que podemos hacer, barrer, recoger basura, lo hacemos con gusto”, expresó Hermin mientras sostenía una escoba improvisada. A su lado, Catarino asintió y añadió: “Esto es de todos. Si no lo cuidamos nosotros, ¿quién lo va a hacer?”

Ambos hombres comparten más que la preocupación por su colonia; también los une un pequeño árbol ubicado en el exterior del parque. Con dedicación, han adoptado la responsabilidad de regarlo ellos mismos. Para ello, acarrean agua desde calles aledañas, asegurándose de que no le falte lo necesario para mantenerse en pie.

Bajo su sombra, Hermin y Catarino se sientan a platicar. Ahí cuentan historias de otros tiempos, recuerdan anécdotas del barrio y observan el ir y venir de quienes aún visitan el parque. Para ellos, cuidar este espacio no es sólo un acto de servicio, sino una manera de permanecer activos, útiles y conectados con su comunidad.

Su ejemplo ha sido reconocido por vecinos, quienes destacan que las acciones de Hermin y Catarino demuestran que las ganas de ayudar pueden más que cualquier obstáculo, incluida la edad. “Son un orgullo para nosotros, nos enseñan que cuando se quiere, se puede”, dijo una vecina que prefirió no dar su nombre.

La historia de estos dos ciudadanos es un llamado a la acción para quienes también desean ver mejor su entorno. Su compromiso silencioso y constante es una muestra de que aún en los gestos más simples puede encontrarse inspiración.

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