Nalbandian vuelve a figurar

El ascenso de Nalbandian fue el más importante de la clasificación mundial, al escalar 12 lugares para situarse noveno. El mismo le permitió quedar como el mejor argentino del circuito, adelante de Guillermo Cañas (12), Juan Ignacio Chela (20) y Juan Mónaco (23). Todo por sus consagraciones en Madrid y París, sus dos títulos en la temporada, en un lapso de tres semanas. Nalbandian escribió un página inédita en el circuito al convertirse en el primer jugador que derrota a Roger Federer y Rafael Nadal, los ocupantes en ese orden de los escaños 1-2 del ranking, en un mismo torneo. Le ganó a Federer en la final de Madrid y el domingo hizo otro tanto ante el español Nadal en París. Nalbandian comenzó el año como octavo en la clasificación, pero molestias en la rodilla y espalda afectaron su desempeño al extremo que su pase a los cuartos de final en un torneo en Barcelona era el resultado más destacado. Su declive en el ranking fue paulatino y el 6 de agosto llegó a figurar en el puesto 26. Pero Nalbandian pasó a ser entrenado a tiempo completo por Martín Jaite y se reencontró con su mejor nivel, el mismo que en marzo del 2006 lo ubicó en su pico de tercero. En cuestión de un mes en la recta final de la temporada, David Nalbandian multiplicó sus ganancias en el circuito y escaló más de 20 puestos para volver a los 10 primeros. Tras su victoria en París, Nalbandian indicó que el secreto de su buena racha radicó simplemente en encontrarse en una mejor forma física. Pero no se apuntó como rival para bajar a Roger Federer, el indiscutido número uno del ranking, de la cima. Como noveno en la Carrera de Campeones, que mide los resultados del año, el argentino quedó como primer suplente para la Copa Masters en Shanghai la próxima semana. Podría jugar en ese torneo que ganó en el 2005, precisamente tras entrar como suplente, en el caso de una baja por lesión de alguno de los ocho clasificados. De momento, el estadounidense Andy Roddick y el ruso Nikolay Davydenko generan dudas. Por ahora, Nalbandian empezó a trazar sus objetivos para el año próximo, con dos deudas pendientes en sus credenciales: "Quiero la Copa Davis y los Grand Slams", afirmó. Argentina nunca ha ganado la Davis, mientras que Nalbandian ha figurado en las cuatro semifinales de los Slams. Perdió su única final, en Wimbledon 2002.

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