Busca Irak revocar inmunidad contra Blackwate

El gobierno iraquí aprobó el martes el texto de una legislación que revoca la inmunidad de las compañías extranjeras de seguridad privada y lo envió al parlamento, dijo un vocero.

La cuestión de la inmunidad ha sido una de las disputas más serias entre Estados Unidos y el gobierno iraquí desde un incidente del 16 de septiembre en que participaron guardas de la firma Blackwater USA y que dejó 17 civiles iraquíes muertos. La decisión del gobierno tiene lugar después de versiones de que el Departamento de Estado en Estados Unidos prometió a los guardaespaldas de Blackwater inmunidad en su investigación del episodio. Funcionarios del Departamento de Estado se negaron a confirmar o desmentir la versión. La portavoz de Blackwater Anne Tyrrell se ha negado a comentar sobre la investigación estadounidense. El vocero del gobierno iraquí Ali al-Dabbagh dijo que el texto aprobado el martes revoca una orden de inmunidad conocida como Decreto 17 que fue emitida por L. Paul Bremer, que dirigió el gobierno estadounidense de ocupación hasta junio del 2004. ``Será enviado al parlamento en los próximos días para su ratificación``, dijo. Al-Dabbagh no señaló a Blackwater en particular pero dijo que ``según esta ley, todas las compañías de seguridad estarán sujetas a la ley penal iraquí y deberán obedecer todas las regulaciones legales del país``. La portavoz de la embajada estadounidense Mirembe Nantongo dijo que no ha visto el texto y no tenía comentario que formular por ahora. La embajada no ha dicho una palabra sobre el incidente y se ha limitado a decir que aguarda los resultados de la investigación. El primer ministro Nuri al-Maliki ha prometido promover el proyecto en medio de una creciente indignación pública por los tiroteos de Blackwater en Bagdad, como también una serie de muertes de civiles iraquíes al parecer a manos de contratistas extranjeros. Tres altos funcionarios estadounidenses de administración de justicia dijeron con el requisito del anonimato que todos los guardaespaldas de Blackwater involucrados en el conflicto recibieron la protección legal mientras los investigadores de la Oficina de Seguridad Diplomática investigaban el episodio. Esa oficina pertenece al Departamento de Estado.


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